Mostrando entradas con la etiqueta vida en japón. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta vida en japón. Mostrar todas las entradas

jueves, 9 de junio de 2016

Comer en un restaurante en Japón

Para que te imagines bien cómo es ir a comer afuera en Japón, marqué las que para mí son las 10 principales diferencias, en 10 pasos:

Antes de entrar: 
1- A la entrada de los restaurantes, se muestran réplicas de los platos hechas de cera. Así es fácil ver más o menos qué tienen y pedirlos.
Como en todos los locales, se puede escuchar desde adentro el grito "Irasshaimase", que sería un "bienvenidos, por favor, pasen".



Entrando: 
2- Un mozo te recibe y te pregunta cuántos son, y te acompaña a una mesa. No es lo más tradicional entrar solo y sentarse. A veces se puede elegir entre sentarse en silla/mesa, en la barra, o bien en unos almohadoncitos en el piso. En los restaurantes en los que te sentás en el suelo, antes de entrar, se sacan los zapatos.


3- Salvo algunas excepciones, se puede fumar adentro de todo el establecimiento. 

4- Lo primero que te trae el mozo es una toallita mojada (que después hace las veces de servilleta) y un vaso de agua, o bien de té verde, que son gratis.

Ordenar y comer:
5- Para pedir es muy fácil: en general, los restaurantes suelen tener cartas con fotos de los platos que preparan.

6- Por supuesto, comen todo con palitos: sopa, pastas, ensalada, pizza, carne. 

7- Si quiero llamar la atención del mozo, no se considera de mal gusto gritar: "Sumimasen" , que sería: "disculpe!", aunque también, muchos restaurantes ponen en sus mesas una especie de timbre para llamar al personal.

8- Muchas veces, los platos vienen acompañados de un bowl de arroz. Para ellos es la comida fundamental, y es de mala educación dejar restos.


Al terminar:
9- En general, el mozo deja la cuenta en la mesa al terminar de traer los pedidos. Si se van agregando platos, se va actualizando. Pero, no se paga ahí, ya que no hay que tocar plata a donde se sirve la comida. Al lado de la puerta de entrada hay un mostrador donde está la caja, y uno paga antes de retirarse. Los billetes o la tarjeta de crédito se entregan con las dos manos, el mozo dice en voz alta cuánta plata recibe, y después avisa en voz alta cuánto es el vuelto.

10- No se deja propina!

viernes, 27 de mayo de 2016

Oh, el país de las reverencias!

A veces, no conocer una cultura genera prejuicios. Mucha gente me pregunta, ya asumiendo una respuesta positiva, si los japoneses son muy sumisos o faltos de carácter, por cómo siempre se están reverenciando. Es un gesto que está muy arraigado a su cultura.

Empleadas en un hotel
Pero las reverencias acá no sólo son una expresión de respeto hacia el prójimo, sino que además, por su origen, simbolizan la confianza. Sería una especie de equivalente a lo que para los occidentales es dar la mano derecha (si te doy la mano con la que empuñaría mi espada, no te voy a atacar) o bien, brindar (si nuestras bebidas, al chocar, se mezclan, no te estoy envenenando -sino, me envenenaría yo también-). Imagínense lo vulnerable que quedaba una persona cuando le "entregaba el cuello" tan fácilmente a un samurái, que siempre portaba su katana?

Estudiantes en un curso saludan a su profesor
Hoy por hoy, por supuesto, nadie amenaza con katanas a otras personas, pero el significado de hacer una reverencia sigue teniendo mucho peso en la sociedad japonesa. Es que para ellos -que no son fanáticos del contacto interpersonal en público, no dan besos ni tampoco acostumbran a estrecharse la mano- la reverencia es saludo, es respeto, es disculpa, es agradecimiento, y hasta mucho más.



Tienen 5 tipos de reverencia que varían en el grado de confianza y formalidad de la conversación y el interlocutor. Siempre se inclina la parte superior del cuello, manteniendo la espalda recta, y la vista hacia abajo. Las primeras cuatro formas van de los 15º a los 90º de inclinación, y cambian de acuerdo a si es de un superior a un subordinado y viceversa, si es para pedir o agradecer un favor importante, y cuestiones no tan mayores. Incluso, muchas veces los he visto hablando por teléfono y reverenciándose como si estuvieran cara a cara con la otra persona.



Los directivos de TEPCO, pidiendo disculpas por el desastre
de Fukushima. Esta reverencia es la más extrema, "Dogeza"


Sin embargo, existe una manera más, reservada para situaciones extremas: para pedir disculpas por errores muy graves, y se llama "Dogeza". Para estas ocasiones, los japoneses se ponen de rodillas con la cabeza gacha, casi en el suelo. Esto es lo que hicieron los encargados de la central nuclear de Fukushima, frente a los canales de televisión, para pedir disculpas a la población por los problemas ocasionados.


viernes, 13 de mayo de 2016

Energía en Japón

Japón es uno de los países con menor autosuficiencia energética entre los países desarrollados. 

En la historia moderna de la energía nipona hubo dos quiebres que cambiaron los hábitos de consumo y producción de electricidad, y van de la mano. 

El primero fue la Segunda Guerra Mundial, ya que después de eso, para reconstruir el país, se industrializaron muchísimo y comenzaron a consumir más electricidad. 

A causa de eso, empezaron a buscar formas de generar su propia energía (tienen poco combustible fósil, pocas reservas de carbón) con lo cual tenían que importar mucho carbón y petróleo. Entonces empezaron desarrollar la producción de energía nuclear hasta convertirse, en 2008, en el tercer mayor productor mundial.

Únicos dos reactores nucleares activos en Japón.
Central Nuclear de Sendai, Prefectura de Kagoshima.
Así, por el desastre de Fukushima en 2011, se cerraron todas las centrales nucleares que estaban en funcionamiento. En todos estos años que siguieron, sólo se reabrieron 2 reactores dentro de una sola central nuclear con medidas de seguridad extremas. (por ejemplo, con unos sensores de vibración de la tierra, si se registran vibraciones en velocidad que anticipan un terremoto, se cierra y bloquean las compuertas).


En las últimas décadas, sin embargo, empezaron a impulsar medidas para implementar más el desarrollo de energías alternativas. Para 2030, el objetivo es aumentar la producción de energías renovables al 22-24% de la generación total, prácticamente el doble del nivel actual.

 Campo de golf en desuso: se reutilizó para instalar paneles solares.
Si bien todavía no se alcanzan porcentajes significativos en cuanto al uso de energías renovables, el país está intentando desarrollar más el uso de energía solar y eólica, especialmente luego de que se dejó de usar tanta energía nuclear. Prácticamente todas las semanas se puede leer sobre nuevas inversiones en estos campos, casi siempre con altas subvenciones por parte del gobierno.

Panel solar para un semáforo.
Kioto.

Además, lo que se ve en la calle, es que ya la mayoría de las casas tienen paneles solares propios en sus techos. Por la autopista también se ven muchos campos con paneles, a veces parecen pocos para abastecer sólo a algunas casas de la zona, y otras, son grandes instalaciones de empresas. Y también otros para algunos usos puntuales: pequeños paneles para abastecer semáforos, etcétera.


martes, 5 de abril de 2016

Cambios y modernización en el modelo de energía

Durante décadas, el modelo de energía que regía en Japón era de monopolios que proveían un servicio caro y tenían un beneficio garantizado. La gente no podía elegir su proveedor de electricidad, sino que les correspondía uno según la zona en la que vivían.
Pero con lo que pasó en Fukushima, cerraron 53 de las 54 centrales nucleares, generando muchos cortes de electricidad. 

El desastre provocó más rechazo de la gente a la energía nuclear. No sólo les parecía inseguro, sino que además, ni siquiera podían obtener un buen servicio, y a pesar de las altas tarifas!

En 2015 se llevó a cabo una encuesta, de la cual resultó que el 80% de los japoneses se cambiarían de empresa si pudieran y si fuera más barato.

Planta de almacenamiento solar flotante más grande
del mundo, en Japón.

Las autoridades se hicieron eco de estas preocupaciones, y se liberó el sector energético: un nuevo modelo en el cual desde el 1ro de abril de 2016, los usuarios pueden elegir su proveedor de energía, no sólo entre los consorcios tradicionales, sino también una gama de start ups. Muchas de éstas compran a operadores que generan electricidad a partir de energías alternativas como la solar y la eólica.


El gobierno espera que esto genere un aumento en la competencia y que incentive la eficiencia y a su vez reduzca los precios y tarifas. 

Esta nueva regulación intenta ayudar al sector energético, afectado desde Fukushima, y al mismo tiempo, atrae muchas inversiones nacionales y extranjeras.

Y quieren saber cómo está funcionando? Sólo en los primeros 3 días de su implementación, cien mil usuarios se cambiaron de compañía.

jueves, 18 de febrero de 2016

Padres organizados, niños estandarizados

Si tuviera que elegir una sola palabra para describir Japón, sería estandarización. Todo está estandarizadísisisisimo. 

La verdad, no se me ocurren situaciones que no estén estandarizadas. Hasta las reacciones para lo impredecible, como los terremotos y otros desastres naturales, están planificadas y ensayadas sobre lo que, para los más preparados, es la mejor manera de actuar. 


No es diferente en las actividades de los chicos. Escuela, deportes, clubes, y hasta la mochila en la que llevan sus libros y cuadernos, que es especial para protegerse la cabeza en caso de terremoto; todo está estipulado para que sea siempre igual.

Por eso, para ir al colegio también tienen una rutina específica. La educación pública acá es muy buena, y por eso la mayoría de los padres manda a sus hijos a escuelas públicas. En esos casos, no se puede "elegir" a cual atender, sino que el municipio les designa la más cercana a su domicilio, y casi siempre son distancias tan cortas que pueden ir caminando. 




Así es que se organiza un servicio de "pool peatonal" en grupos armados: todos los días, a la misma hora, el primer chico de cada grupo, sale caminando de su casa y pasa a buscar al segundo, haciendo a diario el mismo recorrido. Juntos, también siguiendo un camino preestablecido, buscan al tercero, y así sucesivamente. Todos usando una gorra de un color llamativo, en general, amarilla, para ser bien visibles; y los más pequeños levantando un brazo para que los autos los identifiquen a pesar de su corta altura.


Aunque la inseguridad no es un problema en Japón, como empiezan a caminar a la escuela "solos" desde chiquitos, a algunos padres les preocupa que sepan cruzar bien las calles y avenidas. Para eso, se organiza un voluntariado en el que padres y otros familiares se paran en las esquinas más transitadas del trayecto, para monitorear que todo vaya bien. Detienen a los chicos hasta que sea seguro cruzar, y cuando se puede, se paran perpendicularmente al tránsito con los brazos abiertos, por si fuera necesario proteger a los niños.

Mi parte preferida es que en esos horarios de ida-regreso escolar, los voluntarios también "cuidan" de la misma manera al resto de los peatones, no sólo a los niños, y algunos además son muy curiosos con los extranjeros y tratan de charlar con nosotros durante esos minutos que esperamos a cruzar. Ya llevo varias esquinas con lindas historias, no con el más pulido idioma, pero con la mayor voluntad de las dos partes.

jueves, 27 de agosto de 2015

Trasladarse no es un chino: JR Pass

Estuve recibiendo muchas consultas de hinchas de River que vienen a Japón para el Mundial de Clubes, así que tratando de no dejar de lado lo que es la vida acá, voy a ir escribiendo tips para los turistas, especialmente teniendo en cuenta las fechas y las visitas a Yokohama-Tokio (separadas por 40 km) y a Osaka.


TRASLADARSE EN JAPÓN

Los medios de transporte público japoneses son espectaculares. Siempre a horario, limpios, y fáciles de usar. No son baratos, pero hay algunas formas de amortizarlos y sacar el mejor provecho.

APLICACIONES Lo que yo más uso para saber cómo me conviene ir a cada lado, es Google Maps. Me dice a qué hora sale determinado tren, desde qué plataforma, o dónde tengo una parada del colectivo que me lleva, cuál es la opción más rápida, y cuánto sale. Incluso es fácil de entender cuando combina subtes: te dice que camines 200 metros para la derecha que está la combinación con la línea roja, por ejemplo, y cuántas paradas en cada línea.  Otra opción es este sitio, que también indica los costos y tiempos de cada transporte, y la frecuencia diaria. Pueden hoy mismo poner una fecha de acá a unos meses y les va a indicar a qué hora sale el tren, cuánto sale cada alternativa de viaje, y cuánto se tarda. 

Lo más conveniente para turistas, sobre todo para trasladarse entre ciudades, es comprar desde el país de residencia el JR PASS a través de Internet.


QUÉ ES EL JR PASS? Se trata de un pase ilimitado para viajar en todos los trenes incluidos en la JR (Japan Railway) durante una, dos, o hasta tres semanas. También sirve para viajar en el Tokyo Monorail y los colectivos locales JR. Si bien no cubre las líneas privadas de trenes y de metro, un punto muy fuerte es que incluye casi todas las líneas de tren bala o Shinkansen, menos las súper express: Nozomi -el Shinkansen más rápido entre Tokio y Osaka (170 minutos), pasando por Nagoya y Kioto- y Mizuho Shinkansen - que hace el recorrido Osaka-Kagoshima. 

Shinkansen Hikari





Pero no desesperéis! Que si quieren ir de Tokio a Osaka, existe otro Shinkansen, el Hikari, que en lugar de 300km/h alcanza los 270, y tiene algunas paradas más que el Nozomi, por lo que tarda media hora más (200 minutos). Sale cada media hora de Tokyo. También está el Kodama, que es el más lento de todos, porque para en más estaciones.



CUÁNTO SALE? 

Japan Rail Pass
Tipo
Ordinario
Green Car (Primera clase)
7 días consecutivos
29,110 yen
38,880 yen
14 días consecutivos
46,390 yen
62,950 yen
21 días consecutivos
59,350 yen
81,870 yen
Niños de 6 a 11 años: tarifa reducida en un 50%.


Red JR en Tokio
VALE LA PENA? Por supuesto que esto depende de los viajes que cada uno haga. Pero el de una semana, por ejemplo, se amortiza sólo con una ida y vuelta de Tokio a Kioto. Es decir, por el precio de ir y volver a Kioto, pueden viajar de forma ilimitada durante una semana. Por otra parte, si sólo van a hacer viajes urbanos, sin salir de una ciudad, hay otro pase que es diario, pero que no incluye el shinkansen, que puede servir más para esa situación.


CÓMO FUNCIONA? Se puede encargar hasta tres meses antes de usarlo. Es decir que por ejemplo aquellos que viajen en diciembre, no lo pueden comprar hasta octubre. Se encarga por Internet y llega un vale a domicilio por FedEx (ver Cómo lo compro?). Al llegar a Japón, cambian ese vale por un pase en cualquier oficina o estación de JR. Esto se hace con el pasaporte, y cada vez que se utilice, también hay que presentar tanto el pasaporte como el pase, puesto que éste es personal e intransferible. A partir del primer viaje empiezan a correr los días en los que se puede usar.

Acá pueden encontrar qué transportes están incluidos en el JR pass. En este sitio también, y además pueden ver algunas diferencias entre el pase común y el Green pass, que es de primera clase.


CÓMO LO COMPRO?  Éste es un sitio que vende y hace envíos por FedEx a otros países. Por lo que leí tanto en su web como en algunos foros, a todos los usuarios les llegó perfecto a los tres días. Incluso hay varios viajeros de Argentina que estaban preocupados porque Aduana se los retuviera, pero otros argentinos  respondieron sobre su experiencia, que a ellos lo compraron de esta manera y les llegó directo a sus casas, sin ningún problema.


EN EL PRÓXIMO POST: cómo llegar de los aeropuertos más importantes al centro de las ciudades en las que están.

jueves, 6 de agosto de 2015

Temperatura promedio: 35ºC

Mientras que en el verano argentino la frase de cabecera podría ser "Me saco todo", el verano japonés rezaría casi lo contrario, "No me saco nada".

Ayer fui por primera vez a un aquapark nipón. Con toboganes, piletas para grandes y chicos, sombrillas, reposeras, restaurante y bar, era un gran refugio para los 40ºC que acusaba el servicio meteorológico. Hasta ahí, todo normal. 

Pero después de casi ocho meses de vivir acá, y ya varios sin grandes sorpresas, volví a sentir el abismo que, en algunos aspectos, separa nuestras culturas.

El 95% de las personas NO estaba vestida sólo con su traje de baño. Hombres y mujeres escondían la mayor cantidad de piel posible. Sólo algunos adolescentes estaban vestidos de manera "tradicional" para una pileta en occidente. 

Es que más allá de un legado cultural de que quien estaba bronceado era de una clase trabajadora más baja, como quienes trabajan en los campos de arroz y otros cultivos, la población es muy consciente de los efectos nocivos que puede tener el sol en la piel. Aun los que no le temen a los prejuicios sociales, se protegen por cuestiones de salud. Y no es que "se dejan la remera puesta": usan conjuntos de campera y pantalón con filtro UV, paraguas (esto también para caminar en la calle si hay hasta un poquito de resolana), y capuchas o gorros que parecen para protección en cultivos apícolas o para salir a dar una vuelta por el Sahara, de esos con visera y tapa cuellos y orejas. 

Saqué algunas fotos para ilustrar el concepto de TODOS TAPADOS:


Dentro de su jornada de disfrute estacional, no se pueden relajar 100% y dejarse llevar por la espontaneidad, algo que parece tan ausente en esta sociedad. Hasta para esto tienen reglas. En la pileta no se puede quedar quieto charlando con alguien. No sólo es obligatorio circular (por supuesto, todos en la misma dirección) sino que hasta hay una corriente que te fuerza a moverte; eso sí, no hace falta que sea caminando, ya que casi todos usan flotadores, sean en forma de dona, delfines o tiburones. También, más o menos cada una hora y media, se anuncia por altoparlante que todos tienen que salir del agua y hacer un descanso de diez minutos, y luego avisan cuando se puede volver a entrar. 

Entre las reglas, los atuendos, y los platos de arroz con curry que almuerzan con estas temperaturas, no es difícil entender por qué no les gusta el verano. En lugar de tratar de atravesarlo lo mejor posible, pareciera que lo tratan de sufrir más!

lunes, 15 de junio de 2015

El país de la tecnología Parte I

- Debe estar buenísimo vivir allá y ver por adelantado todo lo que después acá sale años más tarde, no?

Es que es cierto. En Japón se respira, ve, huele, palpa y siente tecnología en todos lados. Luces, botones, robots, carteles, baños, máquinas expendedoras, autos híbridos, autos a hidrógeno; para nosotros, los extranjeros, en cada esquina parece que vino Doc y trajo una máquina del futuro. Hay dispositivos que no sabemos ni para qué son, hay artefactos muy sencillos que acá funcionan hace muchos años y no vimos en ninguna parte de occidente, hay cosas rarísimas que no sabemos si son para el hogar, para el auto, o para una fábrica. 

Sin embargo, nuestra casa no es la meca de la tecnología, y de hecho, aprender a manejar con éxito nuestros electrodomésticos todavía nos cuesta trabajo! Menos mal que todavía no compramos el e-robot, el sillón masajeador, la tele 4K, y otros caprichos...


INODORO

El que más intriga suele generar, nuestro inodoro o TOTO, que cumple la doble función de inodoro y bidet, y que, como conté en el segundo post, se enchufa a la electricidad y la tabla siempre está calentita. Con la perilla se regula la intensidad del agua del bidet, y como los dibujos dejan entrever... los botones sirven para elegir hacia dónde dirigir el chorro! Me encantaría llevarme uno a Argentina. Hay algunos que empiezan a tocar música mientras estás sentado, en otros el botón se aprieta automáticamente... Pero estoy buscando uno en el que la tabla suba y baje automáticamente para no depender de la poca memoria de Esposo!



MICROONDAS







Ponele que deducís cómo calentar un café o las sobras de ayer... Pero qué apretarías para descongelar? Si esto hasta tiene la función de un hornito eléctrico o grill! Qué pasó con la ruedita para elegir el tiempo? Éste no podía venir con dibujos o con traductor? 




LAVARROPAS


También tiene función de secarropas, pero usamos sólo el lavado básico y regular. Sobretodo después de que M., una de las chicas argentinas, intentó configurarlo para otro uso, y desde entonces, o termina con medio lavarropas lleno de agua, o se le inunda el lavadero. 


TELÉFONOS Y MÓDEM






Tenemos un set de teléfonos que incluye las funciones de contestador, intercomunicador, despertador, identificador de llamadas, llamadas automáticas, y por supuesto varios sonidos alternativos, entre otras opciones. Por supuesto, no pudimos activar más que para llamar y atender. Del router no entendemos nada, menos mal que no falla jamás!



REGULADOR DE TEMPERATURA 
Así se controla la temperatura del agua en la casa. Hay un mando en la cocina, y otro en el baño, para controlarlo desde la bañadera. El mínimo es 37ºC, y el máximo 75º. De esta manera, elijo la temperatura "mínima" a la que sale si abro solamente la canilla de agua caliente, es decir que si la quiero a 37º, abro sólo la caliente, si esa temperatura me quema, abro agua fría para compensar.






CONTROLES REMOTO - Aire acondicionado y TV
Acá se nos ocurrió que el "control remoto universal" que teníamos en Argentina, para todas las teles, debería cambiar por urgencia su nombre, y estaríamos buscando un desarrollador para que realmente haga controles remoto universales... que funcionen igual en todos los países!! Imagínense lo que sufrimos los primeros días (enero, temperatura promedio 1ºC) cuando no podíamos encontrar el botón de CALEFACCIÓN en el control del aire acondicionado!
Y el de la tele parece muy sencillo, pero Esposo se vuelve loco cuando le aparece un menú acaparando toda la pantalla durante el partido y no sabe cómo sacarla, o cuando se le cambia al paka paka japonés justo antes de un gol!




jueves, 11 de junio de 2015

Japan tips

Ya varias personas me escribieron preguntando con un poco más de especificidad tanto sobre la vida como sobre el turismo en Japón. Consejos, precios, idioma, qué conocer y en qué época visitar qué. 
Todavía me falta mucho por recorrer y conocer, pero bajo la etiqueta tips para el viajero o vida en Japón, empezando por este post, voy a intentar dar un pantallazo con pequeños tips sobre lo que ya sé.

Hoy, el ABC para turistas: cobertura móvil, hospedaje, transporte.

COBERTURA MÓVIL
Nunca lo consideré necesario en otros países, pero como acá no hay tanta gente que hable inglés, es difícil preguntar por la calle, así que lo recomiendo. Al llegar al aeropuerto, se pueden comprar tarjetas SIM para tener internet en cualquier lado. Una tarjeta SIM con 100 mb por día para usar durante un mes sale unos 40 USD. Se puede comprar en el aeropuerto, o también la pueden encargar a domicilio desde otro país. La ponen en el smartphone y ya empieza a andar. Éste es un ejemplo: http://www.bmobile.ne.jp/english/index.html. Además, el 4G acá funciona mejor que el wifi en Argentina. 

HOSPEDAJE
¿Cuánto se gasta? Por supuesto que, como en todos lados, para cada bolsillo hay un presupuesto. Pero el promedio de un hotel de unas 3 estrellas está a partir de 10.000 yenes por noche (unos USD 80). Descubrimos que no importa la ciudad, si es en Tokio o en un pueblito al pie de una montaña, eso es lo que acostumbramos a gastar. Por ese precio se puede encontrar habitaciones tanto occidentales como orientales, las de piso de tatami y el colchón en el piso. El dato curioso: acá no te hacen la habitación por las mañanas, salvo que lo pidas (y pagues) especialmente.

¿Puedo gastar menos? Sí! Hay una forma baratísima de dormir, a la que todavía no me animé. Se llaman Capsule hotels, y sí, son las de la foto de la derecha, no creo que necesite agregar más. No están en todas las ciudades, pero en las más turísticas, como Tokyo, Kyoto y Osaka, las podés encontrar, y conseguir una habitación cápsula desde 2000 yenes (USD 16).

¿Cómo elijo el hotel? Primero siempre me fijo que la habitación tenga baño privado. Y tanto para eso como para la ubicación, aconsejo lo mismo que en todas las ciudades del mundo: que esté cerca de una estación de tren o de metro. Ah! Fíjense si quieren quedarse en un hotel con habitaciones estilo oriental u occidental.


TRANSPORTE
Es muy fácil desplazarse por transportes públicos en Japón. Los boletos se sacan en máquinas dentro de la estación, que se pueden pasar a inglés. Lo complicado es que en algunos casos, no indica el precio a cada estación, sino que en la máquina aparece por secciones, y tal vez los nombres de las estaciones en el mapa estén en símbolos japoneses. No desesperéis, que lo que yo hago cuando me pasa eso y no encuentro mi estación, tengo dos alternativas: pongo en Google Maps que quiero ir a X lado por medios públicos, y GM me indica cuántas estaciones son y por qué línea, y además, indica el costo de ese trayecto. Así saco el boleto. Sino, puedo sacar el más barato, y al llegar a la estación de destino, se hace el "balance de boletos": al que pagó de más le devuelven la diferencia, y al que pagó de menos, se la cobran. De más está decir lo que parece una obviedad en todo lo japonés: la calidad es excelente. Todos los medios y estaciones son limpios, puntuales, y las personas son muy respetuosas: no se puede comer ni hablar por celular mientras se viaja, y los teléfonos tienen que estar puestos en vibrador. Incluso hay carteles en las zonas de los asientos con prioridad para personas mayores, embarazadas, discapacitados, y demás, en los que se pide apagar el aparato, por si se sienta una persona con un marcapasos.

¿Es caro? Sí, sobretodo comparado con el precio de los transportes públicos en Argentina. El mínimo en Tokyo rondaba los 170 yenes (USD 1,30). Si te vas a desplazar todo el día en tren, conviene sacar el pase diario de JR (Japan Railway, la red ferroviaria), que se puede comprar en las estaciones o encargar por internet. Con sólo hacer cuatro viajes en el día, ya se amortiza. Éste no incluye las líneas de metro. Tampoco el tren bala, que se llama Shinkansen. Es bastante caro, pero sirve para desplazarse de ciudad en ciudad muy rápido, ya que alcanza una velocidad de 300 km por hora. Por ejemplo, de Nagoya a Tokyo, sale unos USD 100 para cada lado, y tardo un poco menos de dos horas. También hay servicios que conectan Kyoto, Osaka, Hiroshima, Takayama, y otras. 

Viajar en auto no es mucho más barato: los taxis son carísimos (un viaje de unos 60 km nos salió USD 200. Doloroso). Pero muy pintorescos: en general, es un Toyota Crown clásico. Las puertas se abren solas, el pasajero no las toca, y el conductor maneja con guantes blancos y una especie de boina.  Los peajes no se quedan atrás. Camino a Kyoto hemos pagado casi 6000 yenes (USD 48). Pero todas las ciudades están conectadas por autopistas que obviamente están impecables e inmaculadas, hasta tienen una especie de mamparas a los costados para evitar la polución sonora a los vecinos, así que se puede recorrer prácticamente todo Japón sin salir de la autopista. 


Como dice la frase, "lo bueno cuesta", pero me parece que cuando su uso es más que satisfactorio, cuesta pero no duele. ¿No?

jueves, 4 de junio de 2015

#NiUnaMenos

Hoy es 4 de junio. Ayer, 3 de junio, miles de personas participaron en la convocatoria #niunamenos en Argentina. Y me hubiese encantado participar. 

Habría participado con carteles, con dibujos, con cualquier cosa que pudiera. Porque hoy, 4 de junio, en Japón, la distancia me muestra una perspectiva más grande de la realidad. 

Hoy, 4 de junio, puedo decir que ayer vino un señor a cambiarme el horno, y no me tuve que preocupar por recibirlo estando sola en mi casa, en short y remera como los 31 grados que hacían, ameritaban.

Hoy, 4 de junio, puedo decir que el fin de semana salí con mis amigas por la noche, y no tuve miedo de volver caminando sola. 

Hoy, 4 de junio, puedo decir que no cierro los ojos y trato de hacer lo mismo con los oídos, cuando paso cerca de una obra en construcción. Y no es que los piropos sean en japonés... acá no se acostumbra a elogiarle la cola o las tetas a las mujeres y punto.

Hoy, 4 de junio, no aguzo los sentidos a ver si alguien me sigue en una calle desierta, ni me cambio de vereda si aparece un hombre caminando hacia mí. 

Hoy, 4 de junio, tampoco esposo está intranquilo si tengo que volver sola tarde.

Y hoy, 4 de junio, un día después de una movilización en la que se manifestaron muchísimas personas pidiendo un cambio, y expresando las distintas formas en las que se habilita una impunidad hacia el maltrato o a la falta de respeto a la mujer, espero que se pueda avanzar también en esta dirección en Argentina. 

Porque lo que sí me asusta, es que siga ese acuerdo silencioso, que no va a permitir que nada cambie. Que los mismos que posan con carteles que rezan #niunamenos sigan avalando la indiferencia al observar claras muestras de falta de respeto, que no merecemos. Que esos que ayer, 3 de junio, defendían este slogan, en el futuro, no reconozcan a dónde dejamos empezar la diferencia en el trato entre el hombre y la mujer.

Y hoy, 4 de junio, además de la tristeza que me genera cuántas mujeres no sobrevivieron para estar ayer defendiendo estos valores, y cuántos hijos, hermanos y amigos, fueron a reclamarlos por ellas; me angustia en el alma pensar que puedo vivir más tranquila en un país a 18.070 km de mi casa, que en mi casa.

jueves, 21 de mayo de 2015

Cuestión de perspectiva

Para nosotros fue un mini incidente. Para ellos, un grave accidente, un accidente moral. Sí, moral.


Fue el domingo a la tarde. Le dimos con el espejito al faro de la camioneta que estaba a nuestra izquierda, mientras frenábamos en un semáforo. Se lo rayamos. Bueno, si me piden que sea específica, le dejamos una estrellita en el medio del faro, y nuestro espejito se cerró hasta romper la ventana. Ojo, el espejo en sí está perfecto, sólo se rompió un pedacito del plástico que lo sostiene. 


Frenamos más adelante para ver qué daño le habíamos causado. El conductor bajó hablando por celular con la policía avisando dónde estábamos. Es que acá es obligatorio avisar a la policía todo accidente, por más leve que sea.

Por supuesto, a los 10 minutos teníamos a dos oficiales en la escena del crimen. La presentación pareció sacada de una película inglesa, sólo que en japonés: Buen día, mi nombre es Soichiro y mi compañero es Sato. ¿Están todos bien? ¿Sí? Registros y seguro, por favor. No es tan sencillo, sin embargo, cuando la licencia de Esposo es internacional y los policías no entienden si está vencida o vigente! Después de una hora de una escena en repetición constante de preguntarnos cuándo llegamos acá, le respondíamos en japonés, el policía hacía el switch a inglés y le dábamos la misma respuesta, ahora en inglés, nos seguían pidiendo el pasaporte, a pesar de tener tarjeta de residente, documentación más que suficiente para circular por la calle. Obviamente teniendo tarjeta de residente, no andamos con el pasaporte encima, y al principio no querían dejarnos ir con el auto a buscarlo. Estábamos a 25 km de nuestra casa y por un momento plantearon que fuéramos caminando hasta conseguir un taxi (por ahí no circulaba ninguno). 

Finalmente, se ve que nos vieron cara de decentes o que nos siguieron con mucha discreción, y nos dejaron ir a buscarlos y llevarlos hasta una oficina de tránsito, en la que los cuatro oficiales presentes se agolparon a nuestro alrededor para ver cada sello de entrada y salida de cada lugar, mientras al mismo tiempo revisaban una A4 en la que tenían traducido en dos columnas: 1- January; 2- February; 3- March, y así. Todo, para decirnos únicamente: cuando caduque este registro, si pasan tres meses en Argentina, pueden volver a sacar el internacional. Eso sólo! Pongo las manos en el fuego a que somos toda la acción que tuvieron en el mes.

El problema mayor vino el día siguiente. Lunes. De por sí, el domingo Esposo había tenido que avisar por teléfono a su jefa sobre nuestra peripecia, y creímos que con eso bastaba. Pero no. La empresa es una automotriz. Toda la oficina lo miraba como si hubiese contado que matamos bebés y cachorritos por diversión. Fue el asesino del día. Tuvo que llenar varios formularios informando lo que había pasado, con detalles, fotos, locaciones. El Gerente General llamó personalmente al señor de la camioneta para pedirle testimonio. El nivel de reporte llegó hasta el número 3 de la compañía, dos escalones más y llegaba al Presidente de la Empresa Motor Corporation. NO estoy exagerando, es literal. 

¿Tanto? ¿Seriamente? Por fotos y verbalmente, Esposo les explicaba que sólo fue el espejo, y que fue muy despacio ya que nos estábamos deteniendo en el semáforo, dato que el señor camioneta confirmó. No contentos con todo ese circo, le pidieron a Esposo que armara una Reunión de Emergencia para el día siguiente, en la que hiciera una presentación sobre las causas, consecuencias, reflexiones y necesidades de cambio en el futuro, para todo el sector. Ah, y para este mes, todo el sector tiene que preparar una exposición sobre la importancia el respeto a la seguridad vial. ¿Un poco mucho? Apenas, no?

Es que no es casual que Japón esté entre los países con menos accidentes de tránsito del mundo. De hecho, hace trece años consecutivos que las cifras de muertes por accidentes viales bajan año a año. Y no sólo las víctimas inmediatas, como tienen en cuenta los rankings en Argentina, sino que también se tienen en consideración las muertes ocurridas como consecuencia de un choque, hasta 30 días después de ocurrido.

Realmente no sé cómo se manejará el Luchemos por la vida japonés. Pero esta semana aprendí que, como muchas de las normas acá, no se trata solamente de "hacer las cosas bien" por la regla explícita, sino por la condena social que implica no hacerlo.